lunes, 11 de septiembre de 2006

Nada más tiene que perder ya, todo se ha ido.


Nada queda
de la casa en la que nací
Luciérnagas

Santoka escribe este haiku lleno de ambigüedad, pues plantea el desafío de interpretarlo en particular por el remate de la vibrante tercera línea, en donde la polisemia del mismo ejemplifica como ninguno la raíz de su arte. (Carlos Fleitas)

6 comentarios:

Buk dijo...

Eyyy, me encanta tu blog! Ha sido una gran noticia conocerlo. Desde este momento te tengo ya "fichado" jejeje ;-)
Santoka es uno de mis poetas favoritos. Un haijin genial con una vida como para hacer una película. El último poeta errante, que no sólo escribia versos, sino que también los vivía. Su misma vida era poesía. Un auténtico genio.

Un abrazo
Buk

Fanega dijo...

;-)

Pau i Be...

GolondrinaAzul dijo...

Al estrujar
una hoja de mango…
su dulce olor…


Un lindo haiku tropical!! Estoy encantada con tu blog!!

Flor

Fanega dijo...

;-)

Fanega dijo...

Ese olor... cada día la recuerdo...

Fanega dijo...

¡Encontré de dónde saqué esta foto! Es de Stoneth... Sus retratos de gente de la calle son maravillosos. Están en http://www.flickr.com/photos/stoneth/. Esta en particular es de http://static.flickr.com/46/126461519_231bab826d_o_d.jpg, modificada con el Photo Paint.